4 días y 3 noches casada con Hyuga Neji 10

Nai nai aqui traigo conto >w<

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Diario

Tenten corría tan rápido como le permitían las piernas.

Cuando ella y Neji se habían alejado de la mansión no pensó que se habían retirado tanto. Le pareció el camino más corto que había hecho en su vida, pero ahora después de varios minutos de correr con todas sus fuerzas casi maldijo el hecho de haberse alejado.

Miro a Neji este iba por delante, le sacaba unos cuantos metros de distancia, la joven se saboreo los labios, aún podía sentir el roce de su boca contra la suya.

Sonrió de forma casi inconciente. Bueno, tal vez no.

-¡Tenten! –gruño el Hyuga por delante, volviendo su cara hacia ella -¡vas muy lenta!

-Ahhh –dijo esta quitándose el cabello que se le pegaba a las mejillas. –lo siento –contesto con una sonrisa, esperando un gesto igual de parte de su compañero, el cual como toda respuesta, gruño malhumorado, antes de mirar nuevamente hacia el frente.

-Ahí esta –masculló Neji, cuando la mansión estaba a unos pocos metros de ellos acelero el paso.

La mujer mayor que había sido la nana de Suki en su infancia les esperaba en la entrada con una expresión funesta en el rostro.

Neji se detuvo frente a la mujer, recuperando el aliento.

-Neji-san –llamo la mujer mirando al shinobi y luego a la kunoichi que acababa de llegar –Tenten-san… ¡¿donde estaban?–gruñó ella fulminándoles con la mirada -se supone que debían ser de la guardia de Suki-sama y…

-¿Dónde? -gruño Neji sin ánimos a ser el regañado.

La mujer suspiro ruidosamente.

-Suki-sama esta en el salón con los consejeros y su esposo.

El Hyuga no se molesto en dar las gracias, por fortuna su compañera no era así, le escucho balbucear un mal formado: "gracias" para seguir tras el, Neji corrió hacia dentro de la mansión, con el corazón palpitándole con fuerza dentro del pecho.

Esperaba lo peor, una habitación destrozada, valiosos elementos de la mansión destruidos, o lo peor… una vida humana perdida.

Apretó los labios.

-Suki-san… Tetsu-san –gruño este abriendo la puerta de par en par, un montón de ojos se posaron en el mirandole de la peor manera. Tenten se le unió a los pocos segundos. Y para pronto obtuvo las mismas miradas dedicadas a Neji, sobre si misma. Se mordió un labio de forma nerviosa.

Suki estaba en medio de la habitación con las mejillas encendidas y las lagrimas rodando por su hermoso rostro. Tetsu le miraba desde su lugar compungido, mientras sus consejos cada uno a su lado, trataban de la mejor manera darle ánimos, que parecían no servir de nada.

-Suki-sama… no es tan grave –decía la mujer, tanteando su hombro, mientras ella temblaba bajo el abrazo de su marido.

-Si amor… no es tan grave –la joven dama, seguía llorando desconsolada.

-Pero… -hipo ella graciosamente

-Fueron solo cosas materiales –dijo Kirei -nada se perdió, fue solo una habitación –dijo la mujer, dando suaves palmaditas sobre su espalda.

Tanto Neji como Tenten se aliviaron bastante al escuchar que solo se habían perdido cosas materiales, ninguna vida, pero… en esa extraña familia daban demasiado valor a las cosas materiales, Neji y Tenten se miraron una fracción de segundos, parece que estaban pesando lo mismo.

Si Suki-san había armado tanto escándalo por un pergamino hecho cenizas, por una habitación destrozada se moriría de tristeza.

-¡DONDE DEMONIOS ESTABAN! –grito Naito con una terrible mirada puesta sobre ellos

-Nosotros… -trato de explicar Neji, pero el hombre no le dejo acabar

-¡HEMOS SIDO ATACADOS DURANTE SU AUSENCIA!

-Si lo sabemos… -contesto Tenten avergonzada

-¡Y ES LO UNICO QUE VAN A DECIR!

-Claro que no –contesto Tenten con rapidez –lo sentimos muchísimo es que…

-Temo que una simple disculpa no será suficiente –dijo el recuperando un poco la cordura

Tenten miro el piso avergonzada, mientras el Hyuga a su lado apretaba los puños

-Basta por favor Naito-san –dijo con voz fuerte Tetsu –no tiene porque comportarse de este modo, solo fue una habitación no es tan grave

-¡COMO QUE NO ES TAN GRAVE! –bramo Naito -¡CLARO QUE LO ES!... HEMOS PERDIDO UNA PARTE DE LA HERMOSA ARQUITECTURA DEL CASTILLO… GRACIAS A ELLOS DOS –grito el, señalando a los dos presentes -Y… SE SUPONE QUE ESO NO TENDRÍA QUE PASAR… PARA ESO FUERON CONTRATADOS

-Fue un accidente –dijo Tenten, sin saber que más contestar.

-¡Un accidente que no debió pasar! –dijo el – ¡sabía que fue mala idea contratarlos… sabía que no debíamos confiar en los ninjas de la Hoja… se lo dije… lo sabía!

-Pero nosotros… estábamos

-Demasiados ocupados en otras cosas eso es seguro –contesto el y pasando un fino dedo por sus propios labios añadió dirigiéndose hacía Neji –Neji-san… tiene algo aquí –fijo su dedo en la comisura de sus labios.

El Hyuga para pronto paso una mano hasta su boca, donde el hombre le señalaba, limpio sus labios antes de mirar, un poco de brillo labial color rosado le tiño la punta de los dedos. Se sonrojo.

-Nosotros…

-Cualquier explicación esta de más –dijo Naito, volviendo su rostro hacia Suki, que parecía haber dejado de llorar, pero seguía temblado. Mientras sonaba su nariz ruidosamente de vez en vez. –Ahora… ya no importa –dijo el hombre suspirando y mirando a la joven antes de regresar una descortés mirada hacia los shinobis –Neji-san… Tenten-san… me parece que ya no requeriremos de sus servicios.

Tenten palideció ante aquellas palabras ciertamente no las esperaba, miro a Neji estaba aparentemente sereno, con los ojos resollando fuego bien clavados en los oriundos de Hisui.

-¡Ahh… pero nosotros solo estábamos buscando…!-trato de explicar Tenten.

-Pagaremos una cantidad suficiente para que su regreso a su aldea sea el adecuado, pero creo que su presencia en Hisui esta de más –le interrumpió Naito de forma descortés.

-Pero nosotros… solo…

-Le agradezco Tenten-san… -añadió Naito con una sonrisa socarrona -pero la explicación de cómo usted y su compañero se agasajan durante una misión me tiene sin cuidado

La kunoichi bajo la vista avergonzada, no supo que decir.

-Tenten –llamo Neji, tomando su hombro suavemente para tratar de confortarle, miro al hombre –agradecemos sus molestias –dijo a Naito –no es necesario que nos paguen nada, nosotros nos iremos de aquí lo más pronto posible.

-Muy comprensivo de su parte Neji-san –contesto Naito con una sonrisa –espero que tengan buen viaje

-Y yo espero que puedan combatir con la shinobi que ronda esta mansión en busca de sus cabezas –contesto Neji con la misma sonrisa que Naito le miraba, noto con satisfacción como la sonrisa socarrona del hombre desaparecía –con su permiso

-¡¿Qué una shinobi?

Neji movió suavemente la cabeza, mientras tomaba del brazo a la joven, para indicarle que caminara a la par de el.

-Si así es una shinobi… vamos Tenten

-Pero Neji…

-Vamos –volvió a decir el.

-¡Esperen! –dijo ahora la voz chillona y llorosa de Suki -¡Esperen por favor! –chilló ella hablando en voz alta

-¿Qué pasa? –contesto Neji tomando del brazo a la joven, deteniéndose muy cerca de la puerta y sin siquiera voltear a verlos.

-¿Es eso cierto? –dijo ella, mirándole con los ojos desorbitados -¿Es verdad que una shinobi como ustedes esta aquí?

Neji soltó el brazo de la chica con suavidad, sin embargo no se volvió hacia ellos.

-Aún no estamos seguros del todo Suki-san –contesto Tenten con voz trémula al ver que Neji no le respondía nada, supuso que debía de estar furioso para ser más hermético que de costumbre

-Pero Neji-san

-Las pruebas que hemos tenido indican eso… pero… -miro a Neji en busca de un apoyo sin éxito –aún no estamos seguros de nada

-…pero –dijo Suki con voz queda y temblorosa

-¿Si?

-Pero… ustedes son shinobis… ustedes podrían… -trastabillo la muchacha las palabras.

-Suki-san –contesto finalmente Neji, al ver la indecisión dibujada en el rostro de Tenten –con todo respeto, ahora ya no somos su guardia, si usted quiere que se termine con esta misión deberá encontrar a alguien mucho más capacitado que nosotros –se volvió hacia ellos, con una sonrisa ensombreciéndole el rostro.

La mujer miro con furia a su consejero, Naito parecía no saber que decir.

-Por favor Neji-san –llamo ella, con voz baja inacostumbrada a disculparse –no tome a mal las palabras de Naito-san… solo esta un poco alterado por la situación, no debe tomar en serio sus palabras…

-Que curioso –dijo el alzando las cejas cansado del despotismo del hombre –a mi ciertamente me parecían muy serias sus palabras

-Neji –le reprendió por lo bajo Tenten, el shinobi clavo los ojos en la muchacha antes de volver a decir.

-No solo me ha ofendido a mí, sino también a mi… -miro a Tenten, en busca de un adjetivo apropiado para ella varias palabras se le vinieron a la mente, sin embargo se decidió por: compañera… dudo mucho que sus palabras no sean serias

-Le aseguro que no lo son –contesto Suki con rapidez, temerosa de perder a dos excelente shinobis –y el no tiene el poder para despedir a nadie –fijo sus ojos llorosos en el hombre mayor - los que toman las decisiones aquí somos nosotros –dijo ella dirigiéndose hacia Tetsu

-…

-Además Suki y yo estamos concientes de que su ausencia se debió a que estaban buscando alguna pista cerca de la casa, nosotros se lo habíamos pedido y así lo corroboro Kawaru, a nombre de Naito-san, les ofrecemos una disculpa, sabemos que todo lo que han hecho ha sido por la misión –añadió Tetsu, dirigiéndoles una sonrisa.

Y con esas fueron las ultimas palabras del matrimonio, habían hecho lo que debían, ofrecerles disculpas, tratarlos como lo que eran dos importantes y respetables shinobis, y ahora solo podían esperar, la decisión recaía en ellos dos y en nadie más, Neji se cruzo en brazos con el ceño fruncido mientras Tenten miraba entre la puerta y los jóvenes.

Un largo e incomodo silencio les invadió.

-…bien… -contesto Tenten tras el prologado silencio –bien… supongo que podremos…

-Tenten… -masculló Neji, incapaz de creer sus palabras, no podía creer que después de haber sido insultados de aquel modo, Tenten aceptara tan tranquilamente quedarse a terminar la misión, la kunoichi ignoro sus palabras y añadió con una suave sonrisa.

-Si… estoy segura que podremos quedarnos

Neji dejo caer sus brazos al lado de su cuerpo bufo furioso, odiaba cuando hacía eso.

-Le agradecemos mucho Tenten-san… Neji-san…

-No tiene de que

-Tsk…

-Ahora… si nos disculpa… -añadió Tenten -quisiéramos revisar el lugar donde ocurrió el atentado

-Tsk…

-Por supuesto, le pediremos a Kawaru que les acompañe –contesto Tetsu con esa misma sonrisa amigable, que algunas veces llegaba a rayar en la estupidez.

-¡Kawaru! –llamo Suki en voz fuerte, mientras buscaba con la vista a la sirvienta que no respondió por el simple hecho de que no estaba ahí -¿Kawaru? –Volvió a llamar ella, dándose cuenta esta vez de su ausencia -Ahhh… ¿donde esta cuando se necesita?

-Kawaru-san debe estar aún fuera de casa –interrumpió Tenten procurando no alargar más la búsqueda - después de todo fue ella quien nos informo sobre el ataque

-Bien… -contesto Suki no muy satisfecha con la respuesta -Tetsu querido podrías acompañar a Tenten-san y Neji-san a la alcoba para que busquen cualquier pista y luego indicarles donde deberán dormir… -añadió ella cambiando el tono de voz, de dulce a meloso, ese tonito odioso que se podía ganar solo su adorado esposo - creo que la antigua habitación de mis padres será lo más conveniente.

-Eh… pero… ¿la habitación donde habremos de dormir? -pregunto Tenten intrigada realmente las palabras no le parecían tener sentido.

-Si… -dijo Suki entre hipidos, mientras recibía un pañuelo que gentilmente le tendía su consejera -¿acaso Kawaru no se los dijo?... –ambos negaron con la cabeza, mientras se veían evidentemente preocupados – la bomba no fue puesta a la habitación que ahora estamos ocupado… fue puesta a la suya

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-Perfecto –gruño Neji mientras daba vuelta por la enorme habitación que hacía escasos 10 minutos les había dejado Tetsu en ella –perfecto…

-Neji… por favor cálmate

-Ahora esa loca va contra nosotros… -añadió Neji mirando a la joven -¡y quieres que me calme… lo siento no puedo hacerlo!

-Neji…

-No puedo creer que incluso te pareciera simpática -bramo el, volviendo a dar vueltas por toda la habitación, la joven caminaba detrás de el, esperando calmarlo de algún modo, pero eso parecía prácticamente imposible.

Le llamaba y le llamaba sin ningún cambio favorable.

Tenten finalmente fastidiada dejo de seguirle y se sentó en el borde de la cama, se cruzo en brazos mientras examinaba la habitación, si su anterior cuarto era lujoso, este por mucho lo superaba, era al menos del doble del tamaño, la cama era mucho más cómoda, los cojines, los tapetes, y los cuadros parecían sacados de una fotografía de algún castillo antiguo, la gama cromática era de un color verde jade, y los ornamentos era mucho más vistosos y refinados, todo de oro puro, se sintió como si estuviera en una suite de lujo, sonrio de forma traviesa; era como si fuera su luna de miel, con el pequeño imperfecto de que alguien les quería matar, y su "esposo", estaba hecho una furia.

Nada más lejano de la realidad, la chica se descruzo de brazos intentando por enésima vez calmar al muchacho con los mismos resultados, Tenten desesperada volteo su cara hacia el lado opuesto, poniendo atención en algo que no había notado antes, algo que desentonaba por mucho y parecía haber sido dejada ahí inclusive por equivocación, una sencilla cajita blanca, al parecer de simple porcelana.

Nada más diferente a la habitación que aquello, nada de oro, verde, o cargados ornamentos la decoraban, el característico y sencillo blanco de la porcelana como única decoración le intrigo, Tenten presa de la curiosidad, se acerco con sigilo, ignorando al shinobi que volvía a dar vuelta por la habitación, la kunoichi una vez que estuvo a una pequeña distancia, toco la pequeña cajita con cuidado, primero con la punta de sus dedos y luego, con la palma de la mano. Parecía inofensiva.

Una caja común y corriente.

-¿Tenten? –llamo Neji desde el extremo de la habitación, finalmente había dejado de caminar -¿Qué haces?

-Ahh yo… solo estaba viendo esto… -dijo ella, tocando la cajita, examinadora, agitándole de arriba a abajo.

-Puede ser peligroso -dijo este, con justa razón de ser paranoico, la joven le regreso una mirada gentil antes de contestar:

-No lo creo… parece ser una caja común y corriente –y dicho esto abrió la cajita, Neji preparado para lo peor había sacado una kunai, pero la joven sonrió al darse cuenta de lo que era… una melancólica y suave melodía salía de ella.

Neji guardo la kunai, mientras Tenten volvió su cara hacia el con una sonrisa de satisfacción antes de aclarar

-Una cajita de música

-Si… ya me di cuenta de ello… -resoplo Neji volviendo a dar vueltas por toda la habitación, Tenten dejo la cajita al lado, permitiendo que la música siguiera, fijo sus ojos en Neji, mientras recordaba como es que habían acabado ahí….

Flash Back

-Esta es la habitación, o lo que queda de ella –contesto Tetsu recorriendo la puerta de la habitación con fuerza, varios pedazos de cenizas cayeron sobre sus cabezas.

Mientras Neji y Tenten entraban con cuidado, sorprendiéndose, parecía imposible que aquella habitación fuera la misma en donde habían descansado las noches pasadas.

Estaba irreconocible todo lleno de cenizas, la cama era solo un conjunto de astillas y resortes, el baño había desaparecido, y los libros ahora estaban reducidos a polvo.

-Maldición –masculló Neji mirando a todos lados, el impecable piso, por que cual habían pasado ahora estaba tan negro como su cabello. –no puedo creer que…-miro a Tetsu, este le veía curioso parecía querer adivinar sus pensamientos, Neji decidió no terminar la oración y cambiar el tema rápidamente - Tenten… ¿puedes saber donde estaba colocada la bomba?... –la shinobi solo necesito un vistazo, para saberlo, era su especialidad

-Si… la cama… -dijo ella, notando que el mayor daño había sido ocasionado a la cama y sus alrededores –en medio de ella eso parece

-¿Hay alguna pista?

La joven se inclino sobre ella buscando inútilmente, todo había sido destruido

-No… no hay nada -negó con la cabeza- todo ha sido convertido a cenizas… como la ultima vez

-Maldita sea –contesto el, mientras Tenten le miraba parecía estar a punto de sufrir un colapso nervioso, camino hasta quedar a su lado, rozo suavemente su mano con la suya sonrió débilmente, logrando lo que no había hecho en toda esa misión sacarle una sonrisa sincera, los ojos le brillaron.

-Podremos con esto, Neji –dijo Tenten con un ligero rubor en sus mejillas, el Hyuga acaricio su brazo fingiendo querer quitarle una mota de cenizas de sus ropas. –somos un gran equipo Neji, podemos con esto…

-Neji-san… -llamo Tetsu, mirando nervioso al joven, Tenten le regreso una mirada de desconcierto, por unos segundos parecía que ambos habían olvidado que no estaban solos. -¿Qué es lo que… paso… porque…

-El ataque –le interrumpió Neji quitando con rapidez su mano del brazo de Tenten –el ataque no fue para ustedes… sino para nosotros

-¿Qué?.. ¿Pero como?

-Tenemos sospechas de que una persona muy cercana a Suki-san es la que esta haciendo todo esto –contesto Tenten, mirando a Neji como adivinando sus pensamientos no debía decir más de lo necesario, lo sabía muy bien –debió haberse sentido amenazada, para hacerlo.

-Si –añadió Neji –eso es…

-¡¿En serio? –pregunto Tetsu, emocionado con la idea a atrapar a su agresor ¡¿quien es?

-…

-…

-Lo sentimos… -añadió Tenten, sabiendo lo irresponsable que sería señalar a nadie -pero puesto que aún no estamos del todo seguros no sería lo más conveniente señalar a nadie.

-Entiendo

-Aquí no hay nada –dijo Neji después de una largo silencio - aquí ya no podemos sacar nada… -dijo Neji mirando a la joven y luego a Tetsu -lo mejor será que vayamos a descansar.

-Por supuesto… síganme por favor… la antigua habitación de los padres de Suki… es la mejor de toda la mansión

-…

-¿Por qué ya no la utilizan?

-Bien… cuando la madre de Suki murió, su padre se negó a volverla a usar… aún así tengo entendido que se sigue cuidando de esa habitación a pesar cuando nadie duerme en ella

-…

-Ah… que extraño

-Supongo… que el padre de Suki aún tendrá cariño por ella, y por eso sigue ordenando su mantenimiento

-Claro

-Bien… hemos llegado –dijo Tetsu deteniéndose tras una enorme puerta tallada –esta es la habitación - dijo el abriendo la puerta, ambos se quedaron sorprendidos en su vida habían visto un lugar tan lujoso, ni siquiera Neji - tiene un baño enorme y la ropa que podrán utilizar será traída mañana por la mañana, si necesitan algo pueden llamar a Kawaru…

-Claro

-ahhh una cosa más… -dijo Tetsu antes de salir –tanto Suki, como su padre, tienen un enorme cariño por esta habitación, y dado todas las cosas ocurridas… la perdida del pergamino… la perdida de la habitación… -tanto Neji como Tenten le miraban de forma no grata, el muchacho se aclaro la garganta antes de continuar –Ehmmm… por favor, cuiden muy bien todo lo que hay aquí

Neji frunció la nariz molesto, y como respuesta puso su mano en el pomo de la puerta, para indicarle que podía retirarse, Tetsu intimidado por su presencia decidió que era lo mejor, la puerta se cerró prácticamente sobre su nariz, y casi hubiese jurado escuchar a través de ella, al genio del clan Hyuga decir:

-No aguanto a ese idiota

Fin Flash Back

Tenten cerró la cajita de música, antes de dejarla en su sitio original.

-Neji –le llamo Tenten nuevamente, se levanto para seguirle otra vez, no podía pasar toda la noche así.

-¿Qué? –dijo este deteniéndose con brusquedad sin volverse a mirarla, sabía que no podía evitarla toda la noche, pero sabía de sobra que pasaría que si lo hacía, se conocía demasiado bien, seguramente le reprocharía por haber permanecido tanto tiempo fuera de la casa, cuando la responsabilidad caía sobre los dos.

Además, cada segundo que había pasado con ella bien valía la pena e incluso hasta la muerte de sus protegidos. No podía echar la amistad que había recuperado con otra de sus usuales rabiatas. No valía la pena.

-Por favor –dijo ella, con voz queda abrazándole por detrás, Neji permaneció inmóvil, de todos los años que había compartido con Tenten esa era la primera vez que le abrazaba de esa forma, la mente se le nublo, y no pudo pensar más en Kawaru, Tetsu o Suki, lo único que le importaba era la hermosa castaña que le abrazaba con tanta gentileza y cariño.

Tenten primero tanteo su suerte, paso una mano hasta su abdomen esperando algun rechazo, como no fue así, siguió la shinobi pudo notar como los músculos de Neji pasaron con increíble rapidez de: tensionados a relajados en cuestión de segundos, recargo su cuerpo contra el de el -cálmate… un poco… quieres… -dijo esta sin dejar de abrazarle, era cálido, apoyo su mejilla en su espalda, escuchando su respiración.

-mmm –fue la única respuesta que obtuvo de el.

-Vamos Neji –dijo esta tocando su abdomen suavemente por encima de la tela –trata… -añadió ella sin saber bien que decir- trata… de dormir un poco

Todo el encanto y ensoñación de la que el joven se había sentido preso se termino con esas palabras, no podía tomarse un descanso y menos en ese momento, Neji se soltó de su abrazo se alejo unos pocos metros de ella le miro alzando una ceja dándole a entender que eso sería imposible.

-¿Dormir? –Resoplo molesto -¿realmente esperas que pueda dormir?

-Si la verdad eso espero–contesto Tenten mirándole preocupada a unos cuantos metros de distancia.

-Lo siento –contesto el, con una sonrisa socarrona –pero dormir no entra en mi lista de prioridades.

-Debería ser así, un shinobi agotado no sirve más que una piedra, por más Jounnin que sea.

-No… me fastidies ahora con eso Tenten –contesto el, dando vueltas nuevamente por la habitación –ya tendremos tiempo para dormir ahora lo que tenemos que hacer es idear algún plan que… -la joven se había acercado a el, en cuestión de segundos, sus caras quedaron a un palmo de distancia, Tenten sonrió encantadoramente mientras retiraba una cabello azabache de su rostro, delineo con su suave mano el contorno de su rostro.

-Tenten… por favor… ahora no estamos para…

-¿Para?

-Para… -sus ojos se posaron en la bonita castaña, sonreía tímidamente, parecía levemente avergonzada de hacer lo que iba a hacer. –esto…

-¿Para… esto? –contesto ella con una sonrisilla vergonzosa. -¿Qué es exactamente esto?

-…Tenten por favor… -dijo el volviendo su rostro hacia otro lado, inclino un poco su cuerpo para poder alejarse, sin embargo una fuerte y a la vez delicada mano le detuvo, sosteniéndole por las mangas de la camisa.

El muchacho se volvió para verla, tenía la vista clavada en el piso y las mejillas sonrojadas. Por un segundo Neji casi temió que se pusiera otra vez a llorar, casi juraría que la había escuchado sollozar, sin embargo…

La joven levanto la vista del piso, y enfoco sus ojos oscuros en los del Hyuga, sorprendiéndole sin duda, nunca noto cierto brillito en sus ojos, que conocía de sobra, era aquella forma de mirar cuando se prepara para a atacar.

-Me gustas –dijo ella, después de un rato –me… me… gustas muchísimo –su voz titubeo un poco pero sus ojos siguieron clavados en el, avanzo un par de centímetros hacia el, como para demostrarle que no estaba nerviosa aunque la realidad fuera otra –siempre me has gustado… pero creo… que ahora… no solo me gustas… -bajo unos segundos la vista antes de mirarle nerviosa, Neji le devolvía la mirada sin decir nada, esperando a que terminara de hablar, e inspeccionarle de paso, Tenten siguió hablando –yo… yo… te… quiero… -Neji le seguía mirando sin ninguna emoción dibujada en su rostro, Tenten casi estuvo a punto de correr ante aquella aparente falta de sentimientos –y yo… yo… -sus mejillas estaban encendidas y sus ojos brillantes –y yo… solo quería que lo supieras…

Dicho esto, la joven guardo silencio y el también, Tenten bajo la vista sintiéndose avergonzada, y arrepentida de haberlo dicho, había hablando sin razonar y ahora habría que pagar las consecuencias.

-¿Es todo? –dijo el, después de un rato en el más incomodo de los silencios.

Tenten le regreso una mirada funesta, mientras para ella habían sido las palabras que más le había costado trabajo pronunciar, el lo había tomado de lo más tranquilo.

-Si… -dijo ella, respirando profundamente, mirándole con los ojos cristalizados. –si… -reafirmo ella, luchando para que la voz no le fallara y se quebrara en ese mismo instante, se sentó en borde de la capa, temiendo que las piernas ya no le respondieran –es todo…

Neji miro hacia delante, nuevamente en silencio, se inclino un poco sobre ella y mirándole fijamente dijo sin el menor de los remordimientos.

-¿No vas a ponerte a llorar nuevamente verdad?

La joven sintió su cara arder, estallo en rabia, el deseo de llorar desconsolada se había esfumado y el de asesinarlo se había hecho presente con descomunal rapidez.

-¡NO! NO LO VOY A HACER -bramó ella con los ojos rojos -Y SABES PORQUE…

-Porque eso no sería digno para la mejor y hermosa kunoichi que he conocido

-¿Eh?

-…

-¿Neji que dijiste?

-…No me hagas repetirlo –dijo el, con las mejillas levemente coloreadas y los ojos fijos puestos en ella.

-¿Pero porque… que es lo que tu…?

-¿Crees que te besaría y me comportaría como un idiota cuando estas cerca, solo porque si? –contesto el, con una media sonrisa.

-¿Tú?… es decir… ¿yo?… ¿a ti?

Tenten le miraba con los ojos bien abiertos, balbuceaba palabras entrecortadas que no podían entenderse del todo, pero el conociéndole como le conocía sabía la respuesta que darle

-Demasiado –contesto el, antes de posar sus labios sobre los suyos.

La joven tembló suavemente, cuando sus labios levemente entreabiertos rozaron con los suyos, suavemente recorriéndolos, con gentileza. Tomo un lugar a su lado, o eso le pareció, cuando sintió un nuevo peso sobre el colchón, estaba tan perdida en sus besos que no se dio cuenta en lo más mínimo.

Amistosamente el joven puso su dedo pulgar sobre su barbilla para poder permitirle abrir solo un poco sus labios.

La mano de la joven que había permanecido en sus propias piernas se poso en su cabeza atrayéndole más hacia el, estrechando su contacto, la mano de Neji que hasta entonces había optado una actitud más pasiva se poso sobre su cintura, dejándole descansar ahí por unos instantes.

Tenten acaricio su rostro, su cuello, sus hombros fuertes, su piel nívea, su respiración se agitaba y la de ella se entrecortaba.

Parecían quererse comer a besos, recuperar todo el tiempo que había estado perdiendo, el shinobi acaricio suavemente su mejilla, pero ya no más, ya no habría días tirados a la basura, por su arrogancia, esos momentos estaban en el pasado ahora.

Sus manos rápidamente se pusieron a recorrer su espalda, pegándole contra el, delineando su espina con la puna de los dedos, sintiendo su respiración entremezclarse con la suya, Tenten se estremeció, sintió el corazón del shinobi pegado el suyo. Latía rápidamente, fue estimulante saber que no solo ella estaba muerta de los nervios.

Los labios del shinobi bajaron hasta su mandíbula, arrancadote un suspiro.

-Te quiero… -susurro ella contra su oído… -te quiero… demasiado…

-Ya lo se –contesto el, con su siempre odioso aire de superioridad, la joven casi soltó una risita, que para pronto el acallo con sus labios puestos sobre los suyos, buscando sin detenerse una posición mucho más cómoda, se sentía torpe y terriblemente nervioso.

Le sorprendía como las cosas podían cambiar tan radicalmente, de nunca haber besado a una mujer, a estar ahora en la cama con una de las chicas más guapas de toda la aldea.

Se inclino sobre de ella, depositando su cuerpo sobre el suyo, maravillándose de notar, lo encantadora que se lucía la castaña, con su cabello oscuro extendido por el colchón, sus ojos platinos se enfocaron en los suyos, su larga cabellera azabache, cayo a su lado, haciendole cosquillas en la piel, la kunoichi se sonrojo encantadoramente, era perfecta, se enorgulleció de ser el compañero de aquella atractiva castaña.

-Neji… -susurro ella entrelazando su cabello entre sus dedos.

-Eres hermosa –susurro el, con voz ronca –eres bellísima Tenten –dijo el, más para si que para nadie más, la joven se estremeció contra su piel, por primera vez la joven tuvo miedo, miedo de pensar que aquellas palabras solo fueran dedicadas por la bonita ropa y los maquillajes que no iban con ella.

¿Acaso la parecería linda, cuando regresaran a la aldea?... ¿Cuándo volviese a ser la misma Tenten de siempre con pantalones holgados y camisetas que le hacían verse más como un chico, que como la hermosa joven que era?

-Solo te parezco por…

-Siempre me lo has parecido –le interrumpió el.

-¿Aunque me vista como una marimacho?

El joven apretó los dientes para no soltar una carcajada, miro a la chica enternecido, beso suavemente su frente.

-Aunque estuvieras vestida con un saco de papas… eres muy guapa aunque vistas como un "marimacho" - contesto el, hundiendo su cara en su cabello, aspirando el suave olor a jazmín que desprendía, y como si estuviese avergonzado de sus palabras tan sinceras agrego, oculto su cara, entre su hombro y su oído, para que le escuchara claramente –pero no solo por eso me gustas -finalizó el, enterrándose en su cuerpo, enredando su piernas contra las suyas, bajando sus manos hasta su cintura, acariciando sus caderas por encima de la tela.

Las piernas de la kunoichi se enredaron con las suyas, sus manos se perdieron en sus cabellos, sus pies acariciaban la suave seda de las colchas de la ahora desarreglada cama. Y su cabeza se levantaba un poco para poder besarle con más intensidad, como lo quería, deseaba estar con el, deseaba que sus caricias fuesen más intensas, que Neji fuese suyo y que (por primera vez desde que habían salido de Konoha) aquella misión no terminara nunca.

La kunoichi alzo sus brazos, permitiendo al shinobi, profundizar sus caricias, pero en el instante en que lo hizo tumbo sin querer la cajita de musica que hacía unos excasos minutos estaba escuchando, el golpe fue sordo y duro, seguido de unos cuantos golpeteos de pequeñas piezas metálicas contra la duela del piso, una música suave y melancólica sonó y luego, silencio, el más profundo de los silencios…

Ambos se quedaron sin saber que hacer, si esa casa y esa habitación hubiera sido de ellos, habrían seguido sin detenerse, pero tomando en cuenta todo lo que había pasado, no querían que la lista de destrozos al hogar de los de Hisui, aumentara.

Tenten permaneció inmóvil con los brazos extendidos y una cara de asombro, su boca formaba una "o" perfecta, mientras Neji, mirando hacia el borde del colchón, dijo lo que era más que obvio.

-La rompiste –la shinobi quito de encima suyo a Neji con un movimiento brusco

-¿Qué? –saltó Tenten de la cama, e ignorando la cara de desilusión que el muchacho ponía se inclino sobre la destrozada cajita –no… no… no… no puede ser ¡NOOOOOOOOOOO!

-¿Esta rota? –pregunto Neji con cierto sarcasmo en su voz, al ver los ojos llorosos de la joven

-Siiiii –chilló ella, levantando la vista para verle, el aún seguía en su cómodo lugar sobre la cama, con los brazos cruzados sobre su cabeza, realmente le importaba poco si una común caja de musica quedaba destruida pero al parecer a Tenten le importaba demasiado –… ¡esta rota! van a enfurecerse aún más y no los cul… Ey…

-¿Qué pasa?

-Mira… mira Neji ve esto

-¿Una caja de música rota?

-No tonto –gruñó ella, levantándose del piso con media caja de música entre sus manos.

-Una caja de música rota –reafirmo Neji mirando a la joven, que puso sus ojos en blanco, antes de mostrarle del lado contrario a donde el miraba la caja, Tenten negó con la cabeza

-No, es un cuaderno, un cuaderno guardado dentro de una caja de música –dijo Tenten, por primera vez Neji se vio interesado, se levando de la cama de un brinco, antes de tomar la caja entre sus manos y sacar el cuaderno de ahí con el suficiente cuidado para no cortase un dedo.

-No solo es un cuaderno –dijo Neji mirándole de cerca y hojeando rápidamente –es un diario

-¿Un diario? ¿Y de quien es? –pregunto curiosa mientras el daba la vuelta para ver como se llamaba el propietario

-Hana de Hisui–leyó Neji mirando la delicada letra, los colores rosados con los que fue escrito, indicaban que ese diario era de una mujer, y dado la habitación en la cual se encontraban, eran muy pocas las alternativas, Neji hojeo el diario, antes mirarlo con detenimiento.

-Parece ser de la madre de Suki-san

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Fin del capitulo las dejo ahí

las quiero comenten y dejen karmitas sayo

aaaaaa me encantooo!!!!!
x fin neji corresponde a tenten!!!!
siiii!!!!!jaja
conti onegai!!!
bye bye

O.O!!! neji se esta convirtiendo en un perver jejeje
contiiiiii ptontooooo onegaiiiiiii!!!!!!!! ^^

me encanto siguelo o sino moriré tu sigue así bye